viernes, 12 de junio de 2015

Día #1: Bilbao - Estambul - Osaka


Como diría la Pedroche.....Arranca Japón Express !

Jornada de traslado, día pesado, viaje largo... Primera experiencia con nuestros amigos de la Turkish, que tantas alegrías nos llevan dando desde que hace unas semanas nos cancelaran el vuelo de ida por 'causas operacionales' (ja!). Seguimos reclamando una compensación por la noche de hotel y día de vacaciones perdido... pero la Mejor Línea Aérea Europea (no lo será por el estado de los Airbus que hemos cogido hoy y su repetitiva comida...) no atiende a razones y eso que lo estamos peleando por todos los medios. Por cierto,si alguien se encuentra con el Sr. Director de la oficina de Turkish Airlines en Bilbao, culpable de que no hayamos recibido compensación alguna, que le de recuerdos de nuestra parte. Si hay novedades, os informaremos debidamente.

En fin, que tras la escala en Estambul, hemos tomado rumbo a Osaka con 1 hora de retraso, recuperada parcialmente en vuelo. Tras algo más de 10 horas, aterrizamos en el primer aeropuerto del mundo en muchos rankings: el primero en ubicarse en una isla artificial construida ex-proceso para ello; además, está a la cabeza de los aeropuertos que menos maletas pierde en el mundo y tiene según dicen la terminal más larga con 1,7 km.
Hemos pasado la larga cola de control de pasaportes, recogido las mochilas, pasado el control de aduana y canjeado los pases del tren JR para dirigirnos a Kyoto, que es donde vamos a estar los próximos 3 días. Este ha sido nuestro primer tren japones, el medio de transporte por excelencia en este país y que utilizaremos muy a menudo, sobre todo en las largas distancias. ¿A quién no le suenan los famosos trenes bala?

Con el cambio horario (+7 horas) aquí ya es de noche, así que nos toca aclimatarnos. La estación de Kyoto es muchas cosas en una: estación de tren, centro comercial, zona de restaurantes... Nos alojamos muy cerca, aunque de noche y recién aterrizados, nos ha costado un poco dar con el lugar.

Mañana empezamos a ver una de las ciudades del mundo con un mayor número de edificios patrimonio de humanidad. Dicen de ella, los que la conocen, que a través de sus templos se puede todavía sentir ese Japón ancestral, de constumbres, de sentimientos que el paso de los años no ha podido destruir. Qué ganas de empezar a descubrirlo por nosotros mismos. 

1 comentario:

  1. A nosotros también nos costó un triunfo encontrar nuestro Ryokan en Kyoto. Ánimo con el cambio horario y hacerme el favor de cenar en algún restaurante de Pontocho, que yo no pude y me quedé con las ganas!

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